Pedro Fernández
4 de dic de 20204 min.
Puede que este sea un articulo polémico, pero creo que en estos tiempos la polémica es difícil de lograr en un mundo en el que ya no nos sorprende nada. Más bien es una reflexión en voz alta o el intento de evitar frustraciones en las personas que se introducen en ese mundo o en ese “estilo de vida” tan irreal y tan comercializado.
Cuando se comercializa una moda, un estilo de vida e incluso una emoción, esto tiende a generar un gran mercado, un mercado el cual se llena de personas ávidas de generar ingresos reclamando su parte “del pastel”
Esto es lo que ha pasado con el Fitness, o llamémosle “el mercado de la salud”. Cada vez se valora más un estado de vida saludable y a veces, por encima, un cuerpo estético (según los estereotipos actuales)
Hasta aquí, nada que objetar. Una moda o un movimiento beneficioso para el ser humano, como estar en mejor forma, más saludable y con un mejor rendimiento, es algo que aporta una mejora en muchos aspectos, no solo en el ámbito de la salud. El tener unos hábitos saludables y sanos, el encontrarse bien físicamente y mentalmente, es algo que no tiene precio... ¿O si?
Por un lado, personalmente, me encanta el deporte, y el Fitness, es un deporte y un estilo de vida con el que he vivido muchos años de mi vida, es algo de lo que estoy enamorado y ya no concibo el no alimentarme de una manera saludable y del no tener mi momento diario de entreno (el cual me da una estabilidad tanto física como mental). Es algo que me ha aportado muchas cosas positivas a lo largo de mi vida y me ha enseñado mucho.
El problema es la comercialización que esta sufriendo y los engaños recurrentes que vemos a diario. Entrenadores, “influencers fitness”, marcas de suplementación, gurús del músculo... Están llevando a muchos practicantes “primerizos” a caer en la frustración de no conseguir las metas que les han prometido y auto engañarse creyendo que los resultados los tendrán “a corto plazo”, cuando en realidad este es un deporte de paciencia, disciplina y trabajo constante.
Vamos por partes a desgranar estas mentiras que nos venden:
1- Supleméntate con muchos tipos de suplementos dietéticos para ponerte fuerte.
Claro, que te van a contar, si lo que quieren es vender y que apliques su cupón de descuento para generales ingresos... Primero aprende a comer bien, saludablemente, las cantidades que necesites según tu objetivo y olvídate de suplementarte hasta que no cumplas este requisito, aprende a entrenar correctamente y descansa lo suficiente. Al día siguiente, repítelo. Sin esas premisas estarás tirando el dinero o “regalándoselo” al influencer o listo/a de turno.
¿Digo que no sirvan los suplementos? De ninguna manera, pero depende en que circunstancia y contexto, en alguien que no cuida su alimentación, entreno y descanso no ayudaran.
2- Consigue un físico espectacular y una fuerza sobrehumana en poco tiempo y de una manera natural.
Hemos hablado, que este es un deporte de paciencia y años. Siempre hay atajos recurrentes, están ahí, existen y existirán, hablemos claramente: Esteroides anabólicos.
Aquí y como opinión personal, cada uno puede hacer con su cuerpo lo que quiera, sabiendo los peligros e inconvenientes, creo que es una decisión personal. El problema más evidente, es vender que ese cuerpo es alcanzable de manera natural y solo a base de entreno, dieta y “sus suplementos”, cuando recurres a una farsa y muestras un cuerpo que no es natural como natural para poder vender asesorías y suplementos, estas engañando vilmente a mucha gente que creerá que pueden conseguir un físico igual sin pagar “peaje químico”. Eso les llevara a la frustración y a la obsesión de no verse suficientemente bien nunca. En fin, es la estrategia mas ruin y aprovechada del mercado.
En este caso la critica va para este tipo de personas, no para consumidores de estas sustancias.
3- Mantén todo el año tu cuerpo en un porcentaje bajo de grasa, siempre “aesthetic”
Esta premisa puede tener un efecto negativo en nuestro cuerpo, no es natural estar siempre en porcentajes muy bajos de grasa, tenemos que tenerlo en cuenta. En algún momento puntual, se puede hacer una definición más extrema, pero mantenerla durante mucho espacio de tiempo puede ser perjudicial, entre los problemas que podemos llegara a tener se encuentran los siguientes:
-Poca energía
-Poca recuperación muscular
-Descenso de la testosterona, con los consecuentes problemas hormonales
-Cortisol elevado, con la consecuencia de la merma del sistema inmune
-Cambios en el carácter, etc..
En el caso de las mujeres, el bajo porcentaje de grasa puede producir amenorrea (perdida de la menstruación), cosa bastante frecuente en atletas de elite como corredoras (media, larga distancia), bailarinas, ciclistas...
Un cuerpo con un nivel de grasa muy bajo, es un cuerpo enfermo e ineficiente.
4- “NO PAIN NO GAIN”
No nos flipemos, nos gusta entrenar duro, pero con cabeza. Queremos llegar a durar muchos años en este deporte y debemos saber entrenar inteligentemente. Mas no siempre es mejor, y podemos llegar a lesionarnos si no llevamos una periodización del entreno y una estructura coherente. Esta muy bien la motivación, pero mejor que esa motivación se convierta en constancia. No mola darlo todo un día y quedarte tres en casa sin poder moverte.
“El dolor es temporal, puede durar un minuto, una hora, un día o un año, pero finalmente terminará y otra cosa tomará su lugar. Si me doy por vencido, el dolor durará para siempre”.
¿Sabéis quien dijo esta frase? Lance Armstrong... podéis echar cuentas...
Espero que los más jóvenes se den cuenta de la parte de farsa que hay en este mundillo, ningún suplemento os hará ganar 5kg en un mes, ningún sistema de entrenamiento os hará progresar de una manera desorbitada, ningún gurú os hará cumplir metas a corto plazo y todo lo que viene rápido se va rápido. Disfrutar de los entrenos, mejorar vuestra alimentación, ir paso a paso, lo mejor de llegar a la meta es poder disfrutar del camino
¡QUE NO OS ENGAÑEN!